En respuesta a la arquitectura y la acústica del espacio donde se exhibe The Last Resort, el artista Anri Sala ha desarrollado una instalación específica para cada sitio con treinta y ocho tambores suspendidos del techo.
El sonido de los tambores se genera por el movimiento de las baquetas causado por el aire, en respuesta a las vibraciones que emanan de los altavoces dentro de cada instrumento. En el corazón de The Last Resort se encuentra una interpretación del Concierto para clarinete de Mozart en A Mayor, una de las creaciones musicales fundamentales de la Ilustración, una época en la que las naciones europeas reconsideraban las construcciones de la política y la ciencia. Es por ello que Anri Sala imagina lo que pasaría con el concierto para clarinete de Mozart si flotara y flotara como un mensaje en una botella, siendo afectado por factores externos. Como explica Sala, "tuve en el fondo de mi mente la grieta y la consiguiente contradicción entre el punto de partida de algunos notables principios de la Ilustración -tales como la tolerancia y la aceptación sin prejuicios del otro- y sus consecuencias al llegar, exacerbar los prejuicios, lo que a su vez causó una devastación y una pérdida incalculables ".
¿Cómo afectaría un viaje ficticio a través de los vientos, las olas y las corrientes de agua de alta mar a una obra maestra musical de la era de la Ilustración?