Representado por un adormilado hipopótamo de tamaño natural, Hope Hipo fue ideado por Allora y Calzadilla como una alegoría a los monumentos militares ecuestres (un elemento escultórico recurrente en cualquier ciudad). Esta pieza fue exhibida por primera vez en la 51ª Bienal de Venecia, en 2005. Desde entonces, el “caballo de río” (híppos: caballo, potamós: río) está destinado a llevar sobre su lomo a un performer, que tiene como única tarea leer los periódicos del día. Para su primera exhibición en México, el “actor-lector” deberá encontrar alguna noticia que denuncie o mencione un acto de corrupción y alertar sobre este hallazgo con un silbido prolongado que se transformará en una potente denuncia sonora que será expandida por el recinto que lo aloja.